Situado en el jardín de la zona centro de Tula, un paralibros invita a la lectura. Rodeado de árboles en un ambiente fresco, pobladores y visitantes pueden tomar un libro o más y hacer de su espera, si es el caso, relajada y enriquecedora al poder leer algún material de los poco más de 500 títulos que presenta en su estantería.
Manuel San Nicolás, director de Educación y Cultura de tula, explicó que el paralibros es un espacio de sala de lectura abierta al público en áreas libres, “aquí no hay un límite de tomar un libro, puedes tomar varios, consultarlos y leerlos en una banca”.
Explicó que se atiende a un promedio de 20 a 30 personas al día que disfrutan de la lectura en ese espacio del jardín. “A mucha gente le gusta el paralibros, pues a diferencia de las bibliotecas donde debes estar en silencio, aquí es libre, puedes hacer ruido e incluso expresarte”.
Así, erguido el paralibros entre las jacarandas del jardín, se presentan títulos de novelas, cuentos infantiles, entre otras lecturas breves, en su mayoría, comentó la mediadora de lectura quien aprovecha cuando se reúne un grupo de personas atraídas por la lectura, para hacer lecturas comentadas.
Manuel San Nicolás dijo que el paralibros, forma parte de un programa que fue impulsado a nivel federal por Conaculta, y a la fecha continúa su trabajo en conjunto con subsidio de la Presidencia Municipal de Tula, a través de la dirección de Educación y Cultura, con la finalidad de continuar el fomento por la lectura.
Generalmente se acercan al paralibros, niños y mamás así como adultos, y en menor medida, jóvenes y alumnos de las escuelas ubicadas alrededor de la zona centro de Tula.
Si se desea llevar a casa un libro o incluso dos, en préstamo por una semana, se debe tramitar una credencial, presentando copia de la credencial para votar así como copia del comprobante de domicilio.
El paralibros está abierto de martes a viernes en un horario de once la mañana a cinco de la tarde; mientras que los sábados solo por las mañana y los domingos únicamente por las tardes.
